Ya sea por capricho o por economía, a la congelación de frutas solo te aportara satisfacciones. Los tres métodos que te describimos a continuación son válidos para cualquier tipo de fruta; la elección sólo depende de tu gusto personal.
Lo mismo crees que es algo raro congelar fruta, pero la realidad es que cualquier tipo de alimento puede ser congelado. Así podrás disponer de fruta en cualquier época del año. Algo ideal para las personas que, como nosotros, somos amantes de la repostería natural.
Por ultimo, recuerda que la fruta para congelar debe estar en su mejor punto de sazón, y en perfectas condiciones; las partes estropeadas deben ser eliminadas.
Así se prepara:
- Lava la fruta si fuera necesario, o, si se trata de piezas grandes, pélalas y trocéalas, quitándoles el hueso. Para congelar al natural, forra una bandeja con papel de acetato y extiende encima fruta sin amontonarla.
Congela la fruta en la bandeja y luego pásala a envases rígidos de plástico o aluminio. Tápalos bien y etiquetarlos, poniendo el contenido, peso y fecha.
- También puedes guardar la fruta congelada en bolsas de plástico, siempre que cierres bien y saques todo el aire posible. Para descongelar la fruta, extiéndela en una bandeja con el fin de que no se aplasten con el peso.
- Otro método, fácil y rápido, consiste en poner capas de azúcar en el fondo de los envases rígidos, colocar la fruta y volver a tapar con otra capa de azúcar. En este caso, solo valdría para envases rígidos. Termina siempre con la capa de azúcar, tapa el envase, pon etiquetas y congélalo.
- Algunas frutas quedan mejor congeladas en almíbar. Para ello, prepara un almíbar con 450 gr de azúcar por un litro de agua y déjalo enfriar. Pela la fruta y trocéala. Distribuye la fruta preparando envases rígidos, cúbrela con el almíbar frío, sin llenar demasiado el envase, tapa, etiqueta y congélalo
La fruta así congelada puede tomarse sola, como si fuera fresca, sin almíbar o con él.
Recuerda que:
Las únicas frutas que no se prestan bien a congelar son las granadas y los plátanos. Además los plátanos los tienes durante todo el año y al mismo precio prácticamente estable.
También tienes la opción de comer o adornar con fruta congelada helados y quedar como el mejor de los anfitriones acompañando los hielos de las bebidas o cóctel con estas piezas. Por ejemplo, un gin-tonic con frutas rojas, aparte de darle un toque estético precioso le da un sabor muy personal.
Espero que os haya servido el post de hoy y os animéis a congelar y ahorrar.