Una receta que aunque se llame tortilla nos referimos a un rico postre. Al que también se le puede conocer como Baked Alaska o Tortilla sorpresa, ya que en su interior nos encontramos una capa nueva.
Hay muchas formas de hacer esta receta, así que es normal ver muchas versiones que varían tanto de la forma de hacerla como de los ingredientes principales. Ya que se puede encontrar con el acabado de merengue o con clara montadas. Lo que sí que no puede faltar es la base de helado, la que es el corazón del helado.
Aquí te dejamos una de las formas más fáciles de hacer esta rica receta. Esperamos que la pongáis en práctica y os guste.
Ingredientes:
1 barra de helado en barra
16 bizcochos alargados o lenguas de gato
4 claras de huevo
200 gr de azúcar
2 copitas de ron
Preparación:
Para empezar prepararemos un almíbar empleando ¼ litro de agua, la mitad del azúcar citado y una copita de ron. Pondremos a fuego lento y esperaremos a que espese. A continuación iremos mojando en el los bizcochos.
Iremos colocando la mitad en fila a lo largo de una bandeja, preparada previamente con un papel de hornear, de aluminio o una bandeja de cartón típica de la repostería. La otra mitad de los bizcochos los reservamos para más adelante.
Cogemos los huevos y con cuidado separamos las claras. Cuando tengamos las cuatro las montamos junto al azúcar hasta dejarlas a punto de nieve.
Rápidamente abrimos el envoltorio de la barra de helado y lo ponemos encima de la primera tanda de bizcochos. A continuación cubrimos con la segunda tanda de bizcochos. Después cubriremos todo con la clara montada y lo metemos al horno durante unos minutos a temperatura muy alta.
Lo sacamos y flameamos una copita de ron en su superficie y servimos inmediatamente.
Consejos:
Para montar las claras es importante ir añadiendo poco a poco el azúcar sin dejar de batir.
Podemos utilizar la barra de helado que más afín sea a nuestros gusto, de uno o varios sabores. Aunque lo más normal es utilizar un helado de dos sabores clásicos, vainilla y chocolate.
Conservación:
Al ser un postre con helado es difícil su conservación una vez se haya servido, y menos aún con este tipo de postre que se calienta ligeramente. Así que no se puede conservar de ninguna forma.
Por eso es importante hacerlo cuando tengamos un número de visita amplio. Aunque también podemos reducir el tamaño haciendo la mitad de la barra de helado y mitad de los bizcochos.