¿Te animas? Este postre de piña asada y frambuesas tiene, como poco, buena pinta. No es, ni con mucho, de los fuertes ni calóricos que te vas a topar y, desde luego, resulta un espectáculo desde el nombre hasta el regusto que te deja después de comerlo.
Ingredientes:
Para preparar este verdadero bocatto di cardinale vas a necesitar una lámina de pasta brisa, media piña, un par de docenas de frambuesas, medio limón, dos claras de huevo, cien gramos de azúcar, agua, aceite de oliva virgen extra y un poco de sal.
Elaboración:
Vamos a ver, que no es nada complicado: empieza cortando la pasta brisa en dos rectángulos más o menos iguales y ponlos sobre una bandeja que habrás forrado con papel de hornear. Como no queremos que suban, pincha los rectángulos con un tenedor. Ahora, tápalos con otro trozo de papel.
Para acabar de hacer presión sobre la pasta brisa, pon encima otra bandeja de horno, transparente, si es posible, u opaca si no lo es. Con el horno ya precalentado a 180º, cocina la pasta de 10 a 12 minutos, hasta que se doren los rectángulos.
Vamos a preparar el almíbar. Para ello, pon a calentar el azúcar en un cazo, mójalo con unas gotitas de limón y échale un chorro de agua, más o menos, según quieras que sea de espeso el resultado. Calcula unos 7 minutos desde que rompe a hervir y justo cuando empiece a tomar color, retíralo.
Otro componente de este postre es el merengue. Monta las claras del huevo en un bol e incorpora poquito a poco el almíbar, todavía en caliente, mientras sigues batiendo –al menos durante 8 minutos, hasta que se quede frío. Espolvoréale un poquito de ralladura de limón al resultado y mézclalo lo mejor posible, con movimientos envolventes. Aunque tengas ganas de comértelo a cucharadas, resiste la tentación e introduce el merengue en la manga pastelera.
Ya casi lo tienes. Corta la piña, en rectángulos aproximadamente del tamaño de los de la pasta brisa. Los sazonas y los doras en una sartén con una gotita de aceite. Por otro lado, y con mucho cuidado de que no se rompan, limpia las frambuesas poniéndolas en un colador que sumergirás en agua fría y luego dejarás que escurra.
La parte fácil: pon la piña sobre la pasta brisa y, encima, las frambuesas. Remata el conjunto con una capa de merengue que, si puedes, quemarás con un soplete. Si quieres, puedes hacerte con unas hojas de menta o de orégano para que el conjunto quede más estético.
Recuerda:
Una lámina de pasta brisa
Media piña
De 20 a 24 frambuesas
Medio limón
Dos claras de huevo
100 gramos de azúcar
Agua
Aceite de oliva virgen extra
Sal