El plátano es una de las frutas más antiguas que se conocen. No llegaron a Canarias hasta el siglo XV y hasta el XIX no se comercializaron. Tienen su origen en Asia meridional y ya se conocían en el Mediterráneo oriental hacia el siglo VII.
Tienen fama de engordar, pero también tienen muchos beneficios. Son astringentes, tienen un contenido alto en potasio y magnesio, que fortalecen los músculos (ideales si padeces de calambres en las piernas).
También se recomiendan su ingesta a las embarazadas por su alto contenido en ácido fólico, que ayuda a aumentar los anticuerpos, a fortalecer el sistema inmunitario y a prevenir problemas como la anemia y la espina bífida en los fetos.
Esta receta lleva plátanos macho. Esta variedad de plátano no se come cruda ya que es indigesta, pero al cocer su textura cambia y se vuelve blando, suave y mantecoso.
Es más alargado y delgado que los plátanos dulces y es de color verde. Pero cuando madura, su color cambia a un bonito dorado con manchas y rayas marrones.
Es ideal para cocinar y se usa tanto en postres como en condimento de guisos al modo de las patatas y hortalizas.
Cocido, asado, horneado, cualquiera que sea la manera de cocinarlos quedaremos agradablemente sorprendidos con su delicada textura final.
Ingredientes para 4 personas
4 plátanos macho
100 gr de mantequilla
100 gr de azúcar moreno
150 ml de ron añejo
200 ml de nata líquida
Utensilios
Sartén
Platos
Paleta para dar vuelta a los plátanos
Cuchara de madera
Cuchillo
Preparación
Pelamos los plátanos y los cortamos en rodajas de unos 4 cm de espesor.
Colocamos una sartén en el fuego con la mantequilla. Una vez que la mantequilla esté fundida incorporamos los plátanos, los espolvoreamos con el azúcar moreno y los cocinamos hasta que se caramelicen.
Añadiremos entonces el ron y lo flambearemos quemando todo el alcohol que lleva el ron.
Por último incorporaremos la nata y dejaremos que hierva durante 2 minutos sólo.
Se sirven templados para que el flambeado no se quede seco.
Consejos
Cuando flambeamos debemos tener la campaña extractora apagada. Tened en cuenta que se va a formar una momentanea columna de fuego, así que es importante que el extractor no ayude a propagarlo.
Los plátanos se pueden sustituir por manzanas o peras. Cualquiera de las dos queda perfecta con el ron.
Podemos acompañar el postre con helado de vainilla o con nata montada.
Sólo se puede conservar 2 días en nevera.