Tarta de tres chocolates

Una tarta de estas características es la opción ideal para cualquier sobremesa, es sencilla de realizar y los resultados son verdaderamente espectaculares con una presentación de características similares a los que pueda producir un auténtico profesional.

Ingredientes necesarios:

Para su elaboración será necesario contar con una cuajada, con 150 gramos de chocolate negro, 150 gramos de chocolate con leche y 150 gramos de chocolate blanco en tableta, posteriormente será derretidos, 1 litro de nata, 1 litro de leche entera y galletas de tipo “maría”.

Proceso de elaboración:

En un bol con leche habrá que desmenuzar las galletas con ayuda de un tenedor. En una tartera habrá que colocar 250 gramos de nata,250 gramos de leche entera, un sobre de cuajada y150 gramos de chocolate negro. Este mismo proceso se llevará a cabo por separado con los restantes chocolates, es decir el chocolate con leche y el chocolate blanco.

En una bandeja de horno con cierta profundidad ha de colocarse como base las galletas que anteriormente se han desmenuzado para ser cubiertas de una primera capa compuesta de la mezcla realizada con chocolate negro, dejando reposar unos minutos y arrastrando un tenedor sobre la superficie para evitar que la siguiente capa se mezcle. El orden más adecuado de la colocación de los chocolates es negro, con leche y blanco pues ello permite densidades adecuadas sin que se mezclen entre sí.

Tras la colación de cada una de las capas habrá que dejar reposar la tarta varias horas antes de su degustación siendo muy recomendable su mantenimiento en una nevera a temperatura media. Transcurrido el tiempo de espera se retirará 10 minutos antes de que se vaya a cortar.

Ideas originales para presentar tu postre:

Resulta muy sencillo cortar esta tarta pues posee una gran consistencia y no se deshace en ningún momento. Apuesta por trozos con formas cuadradas y por vajillas en color blanco para que pueda apreciarse la belleza innata de la combinación de colores. Se puede acompañar con sirope de chocolate, con un toque de nata en un lateral o con media galleta situada, de modo vertical en el centro de la superficie.

Una idea que gusta a todas las personas, en especial a los niños, y que se puede degustar con todo tipo de bebidas, tanto calientes como frías, así destacan los cafés, el té o el champán. Una opción muy elegante y fácil de realizar.

Espero que pronto hagais esta exquisita receta que solo ver sus fotos se te hace la boca agua.