Hoy os traemos el que posiblemente sea uno de los postres más tradicionales españoles, el tocinillo de cielo. La historia lo sitúa en el año 1324, cuando las monjas del Convento de Espíritu Santo, de Jerez de la Frontera aprovecharon las claras de huevos que les sobraba de la elaboración de la clarificación del vino e inventaron de forma improvisada esta receta.
Y que tino tuvieron, casi 700 años después sigue en plena actualidad. Si estás interesado en aprender esta vieja, aunque muy sencilla, receta centenaria, te aconsejamos que sigas con nosotros. Porque esto está a punto de comenzar.
Ingredientes para 4 personas:
1 docena de huevos
500 gr de azúcar
3 vasitos de agua
Preparación:
Para empezar la elaboración de este rico postre solo tendremos que primero preparar un almíbar. La forma es sencilla, solo necesitas un vaso de agua y azúcar. Los meteremos en un cazo y a un fuego normal dejaremos que espese unos 15 minutos. Cuando veamos que tiene la consistencia que queremos, apagamos el fuego, retiramos y dejamos enfriar.
Seleccionamos un recipiente hondo, separamos la yema de todos los huevos y las trabajamos, batiéndolas enérgicamente sin parar y añadiendo poco a poco la mezcla que hemos realizado de almíbar, que estará ya frío.
Para hacer esta receta es importante tener un molde especial para este tipo de recetas, este se reconoce porque en cada uno de los moldes tiene un agujero en el centro. No sé muy bien si cualquier tipo de molde, como por ejemplo de magdalenas valdrían. Aunque si son de resina podéis internar pinchar la base de cada molde.
Ahora será el turno de ir preparando el caramelo. Puede ser comprado directamente o hacerlo de forma tradicional, para ello solo necesitas deshacer azúcar en el microondas o en un cazo. Lo dejamos enfriar y añadimos la mezcla de los huevos y el almíbar, previo paso por un colador.
Metemos los moldes en una olla o cazo, según el tamaño, para preparar su elaboración al baño maría. Vertemos nuestra mezcla en cada uno de ellos y dejamos que se vayan haciendo, en un tiempo estimado de 25 minutos. Pasado este tiempo sacamos y dejamos enfriar conservándolos en el frigorífico.
Cuando consideremos que ha pasado el tiempo necesario y vayamos a servir, desmontamos. Para que salga bien es necesario calentar un poco el fondo del molde, para que entre aire y salga sin problemas.
La forma de servirlo puede ser en una fuente adornada con nata y nueces o de la misma forma pero en platos individuales. Recuerda que la forma correcta de disfrutar este postre se sirviéndolo muy frío.